En estos días mientras hacía los dibujos para el diario, he regresado al "Libro del desasosiego". Siempre se regresa a Fernando Pessoa cuando uno va de visita por los abismos.
"Lo que hay de más deleznable en los sueños es que todos los tienen.
En algo piensa en la obscuridad el cargador que se amodorra de día contra la farola en el intervalo de los carreteos. Sé en qué entrepiensa: es en lo mismo en que yo me abismo entre asentamiento en el tedio estival de la oficina tranquilísima.
...Me da más pena de los que sueñan lo probable, lo légítimo y lo próximo,
que los que devanean sobre lo lejano y lo extraño...
el que sueña lo posible tiene la posibilidad real de la verdadera desilusión".
¡Ahora necesito un vino de Oporto!
Vilma
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